Jornada 28
El pasado 27 de abril y en el pabellón de Entretorres tuvo lugar el partido que nos enfrentó a los Kiwis de Bowi, correspondiente a la jornada número 27 de este campeonato que está tocando a su fin.
El partido fue desastroso a nivel colectivo y a nivel individual en lineas generales. Observando la diferencia en la tabla clasificatoria entre ambos equipos, no se entiende cómo es posible que nos marcásemos el partido que nos marcamos; desastroso en lo defensivo, y muy deficiente en lo ofensivo dada las facilidades que el rival nos ofrecía.
Cuando un partido finaliza en empate, la pregunta que nos hacemos es, si con el empate se ha ganado un punto o se han perdido dos. Antes de comenzar el partido y dada las situaciones de ambos conjuntos, podríamos determinar que sin lugar a dudas hemos perdido dos, pero tras disputar el pseudo-partido que realizamos, nos podemos dar por muy satisfechos con el punto cosechado.
Es algo sintomático con este tipo de equipos. Sabemos que es lo que nos va a pasar... Pero no sé porque extraña fuerza caemos en los mismos vicios, y terminamos jugando muy por debajo del nivel que ofrecemos con equipos de mayor entidad.
No se puede ser tan blando en defensa, hubo jugadas en las que simplemente seguíamos a nuestro par creyendo que él sólo nos regalaría el balón por perseguirlo. La presión que realizábamos cuando el rival tenía el balón era totalmente nula, o lo que es peor, en ocasiones inexistente. Dejamos que nos realizaran contras fáciles en superioridad tras absurdas perdidas de balón en linea de medios...
Y en ataque... lamentable. No hubo término medio, ya que, o cada uno intentaba realizar la guerra por su cuenta, o intentábamos hacer la jugada del siglo con infinidad de pases y queriendo rematar en la raya de gol bajo el marco tras haber atravesado el campo en vertical 3 o 4 veces.
El objetivo de este deporte es que el esférico finalice dentro de la portería contraria, y no tratar de poner el balón cuadrado de tanto toque.
No me explico la fobia que sufrimos en este encuentro a la hora de disparar a puerta.
Me niego a hacer una reflexión más profunda porque este tema ya está lo suficientemente hablado como para no continuar con él. Pienso que el verdadero problema radica en una falta de actitud del equipo, y esto es de muy difícil solución por lo visto durante el encuentro.
El partido comenzó con un cero a cero que duraba demasiado, hasta que Adri consiguió el primer gol. El encuentro debía de ser cómodo, pero los Kiwis nos empataron rápidamente, e incluso tuvieron varias ocasiones de adelantarse en el marcador que no supieron materializar. Finalizando la primera parte, conseguimos el 2-1, obra de Marcos con la inestimable colaboración del portero.
Con este resultado acabó la primera mitad, y con la sensación de que aunque las cosas no se estaban haciendo bien, teníamos un marcador de cara que podía obligar a los Kiwis a abrirse, y beneficiar mucho los intereses rasurianos...
Pero nada más lejos de la realidad, en tan sólo 7 minutos consiguieron, darle la vuelta al marcador tras una pájara del Inter de dimensiones mayúsculas.
El 3-2, les duro a los Kiwis bien poco, ya que en al siguiente jugada Raúl, hizo algo que debemos de hacer más a menudo y que cada vez realizamos menos: tirar a puerta en el momento que se tenga tiro.
3-3 y nuevo partido con 12 minutos por delante, pero nuevamente 4 minutos de ausencia total del Inter, nos supuso un sonrojante 5-3 a favor de los Kiwis. Realmente pudo ser más abultado si no es por su falta de definición en algunas ocasiones, o por las intervenciones de nuestro arquero en otras.
En los últimos 8 minutos el Inter volvió a la vida, y tuvo tiempo de empatar a 5 y de desperdiciar al menos dos o tres claras ocasiones de gol, para llevarse el partido por entrar un absurdo "tiki-taka" y ser totalmente inoperantes en el remate de cara a la meta rival.
Debemos aprender de los errores y este partido debe convertirse en el manual de lo que no se debe de hacer.
Goles:
- Adrián: 2
- Marcos: 2
- Raúl: 1
Nos quedan sólo dos partidos por disputar ante dos rivales complicados como son los Amistad y los Neckar. Tratemos de dar una mejor imagen y escalar algún puesto más en nuestra clasificación a la que aún hay que sumar los tres puntos del encuentro frente a los sancionados Echaguy Cuore.
Ánimo Inter!
El partido fue desastroso a nivel colectivo y a nivel individual en lineas generales. Observando la diferencia en la tabla clasificatoria entre ambos equipos, no se entiende cómo es posible que nos marcásemos el partido que nos marcamos; desastroso en lo defensivo, y muy deficiente en lo ofensivo dada las facilidades que el rival nos ofrecía.
Cuando un partido finaliza en empate, la pregunta que nos hacemos es, si con el empate se ha ganado un punto o se han perdido dos. Antes de comenzar el partido y dada las situaciones de ambos conjuntos, podríamos determinar que sin lugar a dudas hemos perdido dos, pero tras disputar el pseudo-partido que realizamos, nos podemos dar por muy satisfechos con el punto cosechado.
Es algo sintomático con este tipo de equipos. Sabemos que es lo que nos va a pasar... Pero no sé porque extraña fuerza caemos en los mismos vicios, y terminamos jugando muy por debajo del nivel que ofrecemos con equipos de mayor entidad.
No se puede ser tan blando en defensa, hubo jugadas en las que simplemente seguíamos a nuestro par creyendo que él sólo nos regalaría el balón por perseguirlo. La presión que realizábamos cuando el rival tenía el balón era totalmente nula, o lo que es peor, en ocasiones inexistente. Dejamos que nos realizaran contras fáciles en superioridad tras absurdas perdidas de balón en linea de medios...
Y en ataque... lamentable. No hubo término medio, ya que, o cada uno intentaba realizar la guerra por su cuenta, o intentábamos hacer la jugada del siglo con infinidad de pases y queriendo rematar en la raya de gol bajo el marco tras haber atravesado el campo en vertical 3 o 4 veces.
El objetivo de este deporte es que el esférico finalice dentro de la portería contraria, y no tratar de poner el balón cuadrado de tanto toque.
No me explico la fobia que sufrimos en este encuentro a la hora de disparar a puerta.
Me niego a hacer una reflexión más profunda porque este tema ya está lo suficientemente hablado como para no continuar con él. Pienso que el verdadero problema radica en una falta de actitud del equipo, y esto es de muy difícil solución por lo visto durante el encuentro.
El partido comenzó con un cero a cero que duraba demasiado, hasta que Adri consiguió el primer gol. El encuentro debía de ser cómodo, pero los Kiwis nos empataron rápidamente, e incluso tuvieron varias ocasiones de adelantarse en el marcador que no supieron materializar. Finalizando la primera parte, conseguimos el 2-1, obra de Marcos con la inestimable colaboración del portero.
Con este resultado acabó la primera mitad, y con la sensación de que aunque las cosas no se estaban haciendo bien, teníamos un marcador de cara que podía obligar a los Kiwis a abrirse, y beneficiar mucho los intereses rasurianos...
Pero nada más lejos de la realidad, en tan sólo 7 minutos consiguieron, darle la vuelta al marcador tras una pájara del Inter de dimensiones mayúsculas.
El 3-2, les duro a los Kiwis bien poco, ya que en al siguiente jugada Raúl, hizo algo que debemos de hacer más a menudo y que cada vez realizamos menos: tirar a puerta en el momento que se tenga tiro.
3-3 y nuevo partido con 12 minutos por delante, pero nuevamente 4 minutos de ausencia total del Inter, nos supuso un sonrojante 5-3 a favor de los Kiwis. Realmente pudo ser más abultado si no es por su falta de definición en algunas ocasiones, o por las intervenciones de nuestro arquero en otras.
En los últimos 8 minutos el Inter volvió a la vida, y tuvo tiempo de empatar a 5 y de desperdiciar al menos dos o tres claras ocasiones de gol, para llevarse el partido por entrar un absurdo "tiki-taka" y ser totalmente inoperantes en el remate de cara a la meta rival.
Debemos aprender de los errores y este partido debe convertirse en el manual de lo que no se debe de hacer.
Goles:
- Adrián: 2
- Marcos: 2
- Raúl: 1
Nos quedan sólo dos partidos por disputar ante dos rivales complicados como son los Amistad y los Neckar. Tratemos de dar una mejor imagen y escalar algún puesto más en nuestra clasificación a la que aún hay que sumar los tres puntos del encuentro frente a los sancionados Echaguy Cuore.
Ánimo Inter!
